REFLEJOS DE REALIDAD

...así que después de tanto tiempo
se nos ocurrió mirar fijamente a los ojos,
y descubrimos semejante abismo
que el miedo a lo desconocido
nos hizo romper para siempre el espejo.

EL RELOJ DE CUERDA

Llenas de margaritas

el asiento de atrás.

Casi está amaneciendo

casi te siento, hoy huele a nuevo.

Tengo calor de invierno

y pierdo credibilidad.

Tiemblo si soy sincero

solo me duermo, si te recuerdo

cerca del mar.

Huelo y lo saboreo

no me hace falta saber nadar.

Creo siempre en tu beso

un buen consejo, en alta mar.

Suena el reloj de cuerda

ya no me tienes que atar

Cumplo con lo pactado

sigo girando, para llegar al mar.

DONDE ENSEÑAN A QUERERSE

Keda el sol iluminado
en cada tic cicatrizado.
Tanto q hemos aprendido
donde enseñan a quererse
que esta el pecho aun caliente,
que aún nos confunden con un niño,
y  el bolsillo esta pesado
con tanto sueño atrapado.

Como la luna aun nos cuenta
donde es bueno acurrucarse
no nos cuesta perder el sueño
asomados al pasado
Dibujando las palabras
que son dogma del futuro
con el lapiz entredientes
con los cuentos ya contados.

A FUEGO

He visto algo,
junto al fuego de la chimenea.

Se me acercaba, me abrazaba, me apretaba
y de nuevo, después de tanto tiempo,
sentía.

A los duendes entre los pasos,
cristales en los pulmones,
relinchos entrecortados.

El pecho desacompasado
lágrimas de alegría,
la voz ahogada a mi lado.

Sentía. 

IN THE BOX

Dentro de la caja es invierno.

Llueve tras los cristales de un puzzle acabado.

Con puertas hacia dentro. 

Miradas hacia fuera.

Se que cualquiera puede estar al otro lado, 

por eso no les llamo

para que siempre sigan estando.

Vivir akí en invierno, 

es creer que siempre existe el verano.

Al otro lado. 

Zzzz...

Hacen cosquillas los recuerdos 

en la planta de los pies.

Estoy tan manchado de emociones,

que huelo a felicidad. 

Y no es costumbre.

Quedan solo segundos, 

poco tiempo antes de que me arrebate el sueño 

el sabor de otro día irrepetible.

Zzzz….

SOMBRAS

Quiéreme, que tengo a las sombras 

queriendo comer

Las sabanas frías, la mente encendida

Los pies negrecidos de tanto correr

Sáciame,  porque los recuerdos 

no queman la piel

Parpadea el viento, vacían los vasos

Llenos ceniceros y mancho el papel

Llamamé,  me miente mi nombre 

y me escondo otra vez

Te echa de menos la playa en invierno

No huele el mojito, y se añeja el querer